Alex y Sally Farnham se mudan a la casa de la abuela de Sally, quien ha fallecido recientemente. Mientras se encuentran en proceso de reacondicionar la casa, Sally se topa con una chimenea sellada en el estudio de su abuela. Contratando a Mr. Harris, un carpintero que había trabajado en esa casa cuando la abuela de Sally la habitaba, le piden que derribe el sello. Pero Harris le advierte que algunas cosas deben quedarse como están. Sally comienza a percibir voces que provienen de la chimenea. Finalmente Sally consigue que la chimenea sea demolida, sin saber que ha liberado un portal donde moran unos pequeños demonios, que comienzan a deambular por la casa, y quieren apoderarse de Sally a toda costa.

Un nuevo edificio rascacielos, con varios pisos aún en construcción, cierra para el fin de semana cuando Eddie Holcomb y Peter Howarth atracan una oficina de inversiones en el piso 39 y cometen un asesinato. Cuando huyen con el botín, Holcomb se separa de Howarth al entrar en un ascensor abarrotado de gente. Con exceso de peso, el ascensor se detiene entre dos pisos. Holcomb, dominado por el pánico, aterroriza a los otros pasajeros. Atrapados entre dos pisos con un delincuente armado, los asustados pasajeros deterioran aun más el mecanismo del ascensor con el riesgo de caer al foso que se encuentra 30 pisos más abajo.

Una topadora poseída por entidades extraterrestres realiza un holocausto con los obreros de una construcción.