Siete chicas de instituto ven sus vacaciones chafadas cuando su profesor (Kiyohiko Ozaki) tiene que cancelar el viaje que tenía planeado realizar con ellas. Las cosas marchan incluso algo peor para Oshare (Kimiko Ikegami), una de las chicas, ya que recientemente su padre le ha presentado su nueva madastra (Haruko Wanibuchi), lo que no le ha hecho demasiada gracia. Mirando un álbum de fotos, Oshare se encuentra con la foto de boda de su madre a quien se la ve acompañada de su hermana (Yoko Minamida) quien nunca llegó a casarse ya que su prometido murió en la guerra. Oshare se pone en contacto con su tía y ésta la invita a ella y a sus amigas a pasar las vacaciones en su mansión en el campo. Cuando el grupo de chicas se presentan en la mansión, allí las recibe la tía de Oshare en sillas de ruedas y medio ciega. Muy pronto las chicas descubren que la mansión tiene vida propia.

Un periodista británico que intenta entrevistar a Edgar Allan Poe durante la visita que el escritor americano hace a Londres termina liado en una curiosa apuesta. Un noble llamado Lord Blackwood le desafía a pasar esa noche (la de difuntos) en una de sus propiedades: una mansión supuestamente embrujada. De la que, por cierto, no ha salido vivo ninguno de los que, con anterioridad, han intentado hacer lo mismo. Como es natural, el periodista acepta el reto.

Una mujer y su amante asesinan al marido de ésta, un médico. Pronto, sin embargo, empiezan a ocurrir cosas extrañas, y se preguntan si realmente lo mataron, o si está volviendo de entre los muertos para atormentarlos.

Una mujer y su amante, el jardinero de la casa, son encadenados, torturados y asesinados por el sádico marido de ella. La hermana de la difunta, Jenny, llega para tomar posesión de la propiedad, pero el científico tiene otros planes, conducir a Jenny (que de por sí es un poco inestable) a la locura e internarla en un asilo, para así poder quedarse con la propiedad. Un médico, el Dr. Joyce, llega para observar el estado de salud de Jenny. Poco después hacen su aparición en la escena los espíritus de los amantes asesinados, en busca de venganza.

En la Europa del siglo XIX, un joven oficial francés del ejército de Napoleón es salvado de la muerte por una bella mujer que, a continuación, desaparece. El teniente, obsesionado con la muchacha, sigue sus huellas hasta llegar al remoto y solitario castillo del Barón Von Leppe (Boris Karloff), un lugar que esconde un terrible misterio.

El Dr. Orloff, gravemente enfermo, comunica a su discípulo el Dr. Jeckill, la fórmula para hacer caminar a los robots mediante impulsos electromagnéticos. Antes, éste había enloquecido debido a los celos, cuando se entera de que su mujer y su hermano son amantes. La venganza y su locura le llevan a límites extremos asesinando a personas a distancia, y sembrando el pánico en la ciudad...