Biografía de Lane Frost, el campeón del mundo de rodeos, desde sus díficiles comienzos hasta su trepidante ascenso a la fama antes de que se produjera su muerte en un torneo.

Homer Bannon, un viejo ganadero del Oeste, no quiere saber nada de la nueva industria petrolera que poco a poco ha ido cambiando el rostro de la región y ha supuesto una enorme riqueza para todos, y mantiene serias discusiones con su hijo Hud. El joven es un irresponsable que necesita mucho dinero para poder mantener su lujoso tren de vida, dinero que no produce la cría de ganado. Entre padre e hijo se interpone el nieto del primero, sobrino del segundo, que siente un gran cariño por su abuelo y una gran admiración por su tío. En medio de este choque de intereses, algo comienza a suceder al ganado

Wyatt "Dusty" Chandler es un cantante de música country de fama internacional. Sin embargo, siente que su elaborada puesta en escena ha acabado por ensombrecer su música, una sospecha que se confirma cuando durante un concierto olvida varias líneas de uno de sus mayores éxitos y sus fans no se dan cuenta. En busca de un cambio de aires, decide marcharse después del concierto sin decírselo a su manager, Lula. Solo se lo cuenta a su mejor amigo y batería del grupo, Earl, aunque éste no sabe ni a dónde va ni cuánto tiempo va a estar fuera. Así, Dusty se afeita, se corta su larga cabellera, y se marcha a la pequeña granja en la que se crió, donde vive su abuela. Finalmente termina en el rancho de la familia Tucker, donde nadie le conoce. Allí se ganará el respeto del dueño, Ernest, y se enamorará de su encantadora nieta, Harley. Cuando Dusty se entera de que su manager lo ha reemplazado en secreto por su novio Buddy, decide volver a los escenarios.

Tras un accidente que la deja en una silla de ruedas, una campeona de los rodeos promete volver a subirse a su caballo y competir de nuevo. Basada en una historia real.

Una joven, que llega a Reno (Nevada) para divorciarse, conoce a un viejo vaquero y decide quedarse unos días en su cabaña. Poco después él descubre en las montañas una manada de caballos salvajes. Con la colaboración de un vaquero especialista en rodeos, decide capturarlos para vender la carne.

En una zona casi abandonada de Houston (Estados Unidos), una adolescente obstinada lucha sin descanso para obtener el respeto de su vecino, un antiguo torero entrado en años cuyos mejores tiempos quedaron ya muy atrás en el tiempo. El choque entre sus dos personalidades cambiará para siempre la vida de ambos.

Un inocente vaquero que participa en rodeos se enamora de una cantante que sólo piensa en triunfar en Hollywood. Él, por el contrario, sueña con fundar una familia y retirarse a su rancho a criar ganado.

Maltrecho debido a un accidente que ha tenido lugar durante la celebración de un rodeo, Junior Bonner (Steve McQueen) decide regresar al hogar familiar en Prescott, en el estado de Arizona. Para su sorpresa, su padre Ace (Robert Preston) se ha ausentado durante una temporada de su ciudad natal, según confesión de su hermano menor Curly (Joe Don Baker) y de su madre Elvira (Ida Lupino), que vive sola en un rancho situado a las afueras de Prescott. Sin apenas dinero, Junior Bonner recurre a sus antiguas amistades para obtener un préstamo y, de esta forma, poder inscribirse en un concurso de rodeo que tiene lugar en la zona. Mientras se prepara para su regreso a la competición, Junior se enfrenta a su hermano a raíz de conocen la noticia de que el padre a ambos ha sufrido un accidente automovilístico y ha perdido el dinero que le había dado Curly a cambio de quedarse con el rancho.

Con “El jinete eléctrico”, Sidney Pollack realiza, sin decirlo, su reinterpretación del género western en el personaje protagonista, interpretado por Robert Redford, un antaño reputado jinete que, porque el western ya no es lo que era, es ahora una herramienta publicitaria. Pertrechado de un traje lleno de luces de neón y diodos LED, monta a un caballo que cuesta una docena de millones de dólares.

Dommy y Pepper, dos vaqueros de Nuevo México, campeones de rodeo, llegan a Nueva York en busca de un amigo que ha desaparecido sin dar señales de vida. Ayudados por un policía local, descubren que su amigo ha sido asesinado y que su hija está en manos de una organización dedicada al tráfico de inmigrantes. (FILMAFFINITY)

Dos vaqueros veteranos y trotamundos (Glenn Ford y Henry Fonda) intentan establecerse y dejar de trabajar, aunque nunca lo consiguen por una u otra razón.

Paul y Meryl Morgan forman una pareja de gran éxito de Manhattan, cuyas vidas casi perfectas, tienen sólo un gran defecto, su matrimonio está a punto de derrumbarse. Pero la confusión romántica en la que están sumidos no es nada comparado con lo que están a punto de vivir: acaban de ser testigos de un asesinato y se convierten en objetivo de un asesino a sueldo. El programa de protección de testigos del FBI los arrastra de su amada Nueva York a un minúsculo pueblo de Wyoming, y la relación que estaba a punto de hundirse parece estar al borde del naufragio definitivo en las planicies del oeste... a menos que en su nueva vida, libre de tráfico, ruido y BlackBerry, los Morgan puedan bajar el ritmo y reavivar la pasión.

Tras quedarse huérfano, el indio Tom Black Bull abandona la reserva y encuentra trabajo en el espectáculo del rodeo. Cuando Red Dillon, un astuto desbravador alcoholizado, se percata de sus habilidades para la monta, le enseña todos los trucos del oficio y lo convierte en una estrella del rodeo, pero él se queda con todas las ganancias y las derrocha en alcohol y mujeres.

Cheyenne Harry y sus amigos, dispuestos a ayudar a Rawhide Jack, asisten a un rodeo con la intención de ganar el premio y entregarle las ganancias a Jack.