Los propietarios de dos barcos fluviales compiten por el control del transporte de mercancías por el río Mississippi. Bill, uno de ellos, espera la llegada de su hijo Willie (Buster Keaton), que ha estado estudiando en la ciudad, para que le ayude en el negocio. Pero Willie se ha convertido en un petimetre inexperto y, además, se enamora de la hija del rival de su padre, lo que agudiza las tensiones entre los dos propietarios.

El edificio de la opera está vacío, Jerry desearía poder actuar y como por arte de magia, su sueño se hace realidad. El pequeño ratón es lanzado a un reino encantado donde todo es posible: bosques de caramelo, copos de nieve cantarines, ¡hasta los muñecos cobran vida!. Jerry lo pasa en grande con sus nuevos amigos y es el ratón más feliz del mundo cuando baila con la bailarina de una caja de música. Desafortunadamente, los gatos callejeros, dirigidos por Tom, irrumpen en su fiesta y raptan a la bailarina de la caja de música causando estragos en el reino de las vacaciones. Está en manos de Jerry arreglar el asunto y con la ayuda de Tuffy, un dulce ratón, y otros muchos nuevos amigos, ¡Jerry podrá conseguirlo!.

Hace tiempo, Inglaterra fue reinada por un rey noble y justo, hasta que un día enfermó. Entonces, el Capitán de la Guardia tomó el control y mandó que subieran los impuestos en nombre del rey. Un día, Mickey Mouse, un mendigo que persiguió a su perro Pluto hasta el palacio, se encontró al príncipe, que resultó ser idéntico a él. En ese momento al príncipe se le ocurrió cambiarse entre ellos, y así descubrir como es la vida de cada uno.

Unos malvados buscadores de petróleo dan un plazo de un día a los indios para irse de sus tierras. El jefe indio ordena a sus guerreros que maten al primer hombre blanco que aparezca. Buster aparece en escena persiguiendo a una mariposa. (FILMAFFINITY)