Un aspirante a periodista espera escribir una gran historia, después de pasar la noche en una casa embrujada.

Stan, un agente inmobiliario sin escrúpulos, aterrado ante el hecho de ir a la cárcel por culpa de un delito de estafa, tratará de aprender una misteriosa arte marcial gracias a un maestro que le instruirá para intimidar a los reclusos y ser así respetado dentro de la cárcel.

La vida en la edad de piedra es dura para el pobre Atouk porque, aunque está muy enamorado, como es el más pequeño y el más debilucho de los cavernícolas de su tribu, el objeto de sus deseos, la hermosa Lana no le hace ni caso. Además el compañero de Lana, Tonda, un chicarrón que es además el jefe de la tribu, lo ha echado de la caverna. Atouk se ve obligado a vagar por ahí, donde acaba formando extrañas alianzas con personajes que, al conocer su historia, se deciden a ayudarle para que vuelva con su clan.

Stanley (Jerry Lewis) es un botones un tanto simple del lujoso Hotel Fontainbleau de Miami Beach, Florida. Los huéspedes van y vienen, pero Stanley está al pie del cañón día tras día, enfrentándose (y creando) todo tipo de catástrofes que incluyen confrontaciones con clientes difíciles de complacer, llaves de habitaciones cambiadas y llamadas de teléfono equivocadas

Poco antes de morir, don Diego, cuyo afán por defender a los pobres de la injusticia del gobernador le ha llevado a convertirse en "El Zorro", cede a su hijo su capa y su antifaz para que siga con la labor que el comenzó.

Buzz Johnson y Stanley Livington tienen una vida tranquila trabajando como dependientes en una librería. Un día entra en la tienda una atractiva mujer, buscando un libro titulado ”África Negra”. Queriendo impresionarla, Buzz se inventa que Stanley es un buen amigo del autor del libro y que le ha acompañado varias veces en sus viajes a África. La mujer, Diana, le pide que le haga un mapa para su próxima expedición, a cambio de una buena suma de dinero. Pero la noche en que tienen que entregar el mapa y recibir el dinero, son secuestrados y llevados a África... (FILMAFFINITY-SETROC)

Aunque no conste en la historia oficial, dos héroes anónimos fueron los auténticos protagonistas de la conquista de la última frontera del Oeste americano. A finales del siglo XVIII, un explorador borracho llamado Bartolomew Hunt y su compañero Leslie Edwards guiaron una expedición de colonos más allá de las Montañas Rocosas hasta llegar a las costas del Pacífico.