Un hombre de mediana edad decide suicidarse. Su única preocupación es encontrar a alguien que le ayude y se comprometa a enterrarlo. Esta situación le permite conocer a una gran variedad de personajes.

En tiempos de la Gran Recesión, Fern, una mujer del poblado de Empire (Nevada, Estados Unidos), pierde su empleo en el 2011 tras el cierre de la fábrica de materiales de construcción donde trabajó junto con su esposo, quien recientemente falleció. Con sesenta años y sin otra alternativa, decide vender la mayoría de sus pertenencias y comprar una furgoneta para vivir y viajar por el país en busca de trabajo, como nómada de hoy en día.

Nueva York. Un camionero (James Cagney) decide hacerse boxeador para ayudar a su hermano que se dedica a la música (Arthur Kennedy), pero a un gángster sin escrúpulos no le gustará la idea.

Dos jóvenes inadaptados se dirigen a New York City para celebrar a su ídolo y musa Stevie Nicks, en la Noche de las 1000 Stevies. En el camino, con el fin de escapar de sus dolorosos pasados, deberán descubrir sus virtudes y aprender a aceptarse a sí mismos.

Raymond Lembecke es un estafador que acaba de salir de prisión después de cumplir una condena por vender drogas para su jefe de la mafia, Tony Vago. (Lembecke era inocente y asumió la culpa por Vago). Lembecke cree que Vago le debe mucho, así que, cuando su exjefe le consigue un trabajo miserable en un almacén, decide vengarse y planea robarle un millón de dólares en drogas. .

Diane Ford, conductora de camiones de largo recorrido, ve limitado su libre estilo de vida y sus relaciones cuando, debido a una emergencia médica, debe cuidar de su hijo, al cual abandonó hace 11 años

Un hombre regresa a la ciudad en la que nació para enterrar a su padre. Decide entonces quedarse allí y acostumbrarse al tipo de vida del que un día renegó, basado en las constantes estafas y pequeños hurtos que llevan a cabo sus familiares.

La libertad de los días de verano, recorrer Europa en tren, ligeros de equipaje, improvisando cuál será la próxima parada, nuevas experiencias y compañeros de aventuras. Y los amores efímeros, esos que dejan huella (pero no herida). Eso es esta Días color naranja, que empieza cuando Álvaro vuelve de Corea y se queda varado en Atenas por culpa de la explosión volcánica de Islandia de 2010. Es así como termina en un tren, donde conoce a un grupo que viaja en interrail. Entre ellos, la sueca Berta, a la que una edición de Los papeles póstumos del club Pickwick de Dickens le une.