El documental señala los peligros resultantes del crecimiento exponencial de los cultivos de transgénicos, que en 2007 cubrían 100 millones de hectáreas, con propiedades genéticas patentadas en un 90% por Monsanto.

Ola es una adolescente de catorce años a la que las circunstancias le han obligado a madurar muy rápido: debe cuidar de su hermano autista Nikodem, de quien ni su padre alcohólico o su madre ausente se harán cargo.

Este documental realiza un viaje siguiendo el rumbo de tres recientes instantes de indignación en distintas partes del mundo: en Madrid, con los indignados que se tomaron el sector de la Puerta del Sol; en Nueva York, con Occupy Wall Street, y en Santiago de Chile, cuando después de siete meses de ocupación, los estudiantes entregan sus colegios gritando "¡La educación chilena no se vende, se defiende!".