G. es un mercenario de élite al que encargan hacer limpieza dentro de su organización. Al mismo tiempo, tendrá que enfrentarse a una lucha de poder dentro de su propia casa.

En la seca estepa castellana a finales de los cuarenta, cuando poder religioso y civil van de la mano, un Sujeto, máxima autoridad local, ve tambalearse sus principios por la llegada del Prójimo, un afilador forastero. Se retarán en un duelo dialéctico en tiempos en los que no hay pan para nadie; en que sólo quedan tortas... de ayer.