¿Qué tendrá la Cannon para inspirar no uno, sino dos documentales? La respuesta es fácil: cinefilia sin complejos, descaro y dos cerebros, Menahem Golam y Yoram Globus, más grandes que la vida. Si The Go-Go Boys se centra en la tormentosa relación entre los dos primos, Electric Boogaloo analiza las demenciales estrategias publicitarias con que la productora sacudió los cimientos de Hollywood.

Más de 65 millones de personas en todo el mundo han sido obligadas a salir de sus hogares para escapar del hambre, el cambio climático y la guerra en el mayor desplazamiento humano desde la Segunda Guerra Mundial. Un viaje épico de la película conducido por el artista renombrado internacional Ai Weiwei, da una expresión visual de gran alcance a esta migración humana masiva.

Documental que investiga una misteriosa enfermedad, Resignation Syndrome, que causa que niños refugiados en Suecia con graves traumas en su vida caigan en un estado similar al coma.

En este documental Tash Despa, refugiado político en el exilio, vuelve al Tíbet once años después de su huida, acompañado por Jezza Neumann, director que ya había realizado en el 2007 un aclamado documental titulado "China's Stolen Children", sobre los niños robados en China. Durante tres meses recorren clandestinamente el país para averiguar cómo es la vida de los tibetanos bajo la autoridad china. Bajo el riesgo de ser encarcelado o deportado, Despa se infiltra en el país para mostrarnos “el genocidio de la cultura” descrito por el Dalai Lama. Despa se entrevista con los nómadas que han sido obligados a abandonar su modo de vida tradicional para vivir confinados en reasentamientos. Se encuentra con un estado altamente militarizado que encarcela y tortura a los disidentes, esteriliza a mujeres y las somete a abortos forzados.