Después de un accidentado pasado, Norman Dale es contratado para entrenar a un equipo de baloncesto. A pesar del rechazo que sufre por parte de los jugadores, de un antipático profesor y de unos vecinos que intentan echarle, Dale, que es un hombre lleno de energía y de una pasión inquebrantable por el juego, no se rinde. Pero ganarse al equipo es sólo la mitad de la batalla en un mundo en el que los equipos débiles pueden acabar jugando contra rivales de primera, pero un forastero tenaz puede levantar el orgullo de todo un condado.

Derice, Sanka, Junio Bevil y Yul son cuatro atletas jamaicanos, sin apenas recursos y sin tener conocimiento o adaptación a la nieve, pero dispuestos a alcanzar una difícil meta: ganar la medalla de oro nada menos que en los Juegos Olímpicos de invierno de Calgary, Canadá. Para ello reclutan como entrenador a un ex-campeón norteamericano (John Candy), quien aceptará la imposible tarea debido a su precaria situación económica.