Poco convencional western que relata de forma retrospectiva (flash-back), las múltiples aventuras y peripecias vividas en el salvaje Oeste por Jack Crabbe, un anciano de 121 años que sobrevivió al general Custer y a la época de las guerras contra los indios.

El avaricioso gobernador Lepetomane y su malvado ayudante Hedley Lamarr quieren que los habitantes de Rock Ridge abandonen la ciudad, para vender los terrenos a una compañía de ferrocarril. Para facilitar sus maquiavélicos planes, nombran sheriff a Bart, un negro condenado a la horca, para que fomente el desorden y la anarquía en la ciudad.

Con “El jinete eléctrico”, Sidney Pollack realiza, sin decirlo, su reinterpretación del género western en el personaje protagonista, interpretado por Robert Redford, un antaño reputado jinete que, porque el western ya no es lo que era, es ahora una herramienta publicitaria. Pertrechado de un traje lleno de luces de neón y diodos LED, monta a un caballo que cuesta una docena de millones de dólares.

Como todas las ciudades del oeste, Daisy Town tiene un salón. Y quien menciona tabernas también menciona tiroteos, peleas y duelos. El resultado; la tranquila ciudad se convierte rápidamente en un escondite para todo tipo de chicos malos Solo un hombre puede hacer que la gente respete las leyes: ¡Lucky Luke!