Reinado de Eduardo VII (1901-1910). Una familia inglesa formada por un padre banquero, una madre sufragista y dos niños rebeldes -que pretenden llamar la atención de su padre haciendo la vida imposible a todas las niñeras-, se verá alterada con la llegada de Mary Poppins, una institutriz muy especial, que desciende de las nubes empleando su paraguas como paracaídas. Debut y Oscar para Julie Andrews en este clásico del cine familiar que en su día batió récords de taquilla. Una niñera mágica y canciones pegadizas que harán las delicias de los más pequeños de la casa.

Willy Wonka es el excéntrico dueño de una gran fábrica de chocolate. Un día decide ofrecer a cinco niños una entrada dorada que les permitirá recorrer la dulce fábrica. Uno de los ganadores es Charlie Bucket, un niño pobre de buen corazón que espera un futuro mejor para él, para su madre y sus cuatro abuelos. Los otros ganadores resultan ser cuatro insoportables niños.

Por primera vez los Beatles han decidido romper todas las reglas: saltarse el programa, ignorar sus obligaciones y saborear la libertad. Pero, para ello, tendrán que dar esquinazo a sus admiradores, esquivar a los periodistas y desobedecer a sus mánagers.

Lorelei y Dorothy son dos cantantes que hacen un crucero desde los Estados Unidos a París. Una rubia y otra morena, con su belleza y encanto seducirán a todo el pasaje. Las dos tienen el mismo objetivo: casarse con un millonario. Pero hay un inconveniente: Lorelei tiene un novio, cuyo padre contrató un detective para que la siguiera.

Lili Marleen es la historia de una canción que, durante la Segunda Guerra Mundial, llegó a convertirse en un himno, primero del nazismo y después del bando aliado. En 1936, Norbert Schultze, un pianista de cabaret, le puso música a la letra que había escrito años atrás un soldado alemán. Tres años más tarde la grabó en disco una bella pero mediocre cantante, Lale Andersen, que consiguió un éxito y una popularidad tales que los servicios de propaganda del Tercer Reich decidieron hacer suya la canción.

“El embrujo del fandango”, que de forma muy elemental pretende ser un corto de ficción sin conseguirlo, es una pieza cinematográfica con excelente sonido y brillante fotografía cuyo valor fundamental es demostrar el hacer de una artista, prematuramente fallecida, que cautivó a los espectadores de diferentes latitudes por su impecabilidad en la práctica del fandango, género español de difícil ejecución.