Un misterioso criminal tiene aterrorizada a la ciudad de Nueva York. Se trata de un estrangulador, maestro en el arte de los disfraces, que se dedica a matar a mujeres de mediana edad, en las que no hay nada destacable; su vulgaridad es, al parecer, lo que interesa al asesino. El psicópata tiene la curiosa costumbre de llamar al detective de policía Morris Brummel, para hablar con él sobre sus víctimas. Así es como Brummel se convierte en el responsable del caso. La vida del detective es de lo más gris y anódina: vive con su anciana madre y tiene que soportar su autoritario carácter. Gracias a sus primeras pesquisas conoce a la bella Kate Palmer y la lleva a su casa para presentársela a su madre. Por su parte el estrangulador, Christopher Gill, un hombre enamorado de la buena vida, disfruta creando rompecabezas y pistas falsas para Brummel.

En un mismo día, son dejados en la puerta de un asilo de monjas, con cartas, los bebés Carmelo y Adriana Águila, hijos de rica familia y Polito Sol, hijo de pobres. Pasados doce años los niños huyen del lugar y crecen juntos hasta convertirse en un trío inseparable, ganándose la vida en la calle vendiendo periódicos y lotería. El padre de Polito, se enriquece con la lotería y comienza a buscar a su hijo, a quien no reconoce cuando éste le vende un periódico. Pasados los años los tres abandonados se dedicarán al espectáculo convirtiéndose en el trío Águila o Sol en busca de la fortuna que no tuvieron de pequeños. Los destinos de los cuatro personajes se cruzarán, en medio de números de carpa, borracheras y cómicos enredos.

Basada en una obra teatral del propio Stoppard. Narra la historia del príncipe Hamlet a través de dos personajes secundarios que aparecen en el drama de William Shakespeare.