Un sardónico retrato de un artista impulsivo y apasionado en el que apenas se divisa la frontera entre persona escénica y persona real.

En la casa del compositor vienés Johann Strauss, vive Johann Mouse. Cada vez que el compositor toca sus valses, el ratón empieza a bailar incapaz de controlarse. Un día, cuando Strauss está fuera, el gato doméstico empieza a tocar la música de su maestro. Esto obliga al ratón a bailar, concediéndole una oportunidad al gato para cazarlo

Roberto Morán, un joven que trabaja en una fábrica y toca el bandoneón, decide aprender música en un conservatorio dirigido por un viejo músico frustrado llamado Don Matiás. Este ve gran potencial en Roberto y lo hace concentrarse en la música clásica, pero el muchacho no va a olvidarse fácilmente de su verdadera pasión: la música popular.