Una anciana (May Robson) mantiene correspondencia con su hija, que vive en España, y le hace creer que es una gran dama de la alta sociedad que vive en un lujoso hotel. En realidad, es una alcohólica que vive de la venta ambulante de manzanas. Cuando su hija le anuncia que irá a verla para presentarle a su novio y a su suegro, miembros de una aristocrática familia, la desesperación se apodera de ella.
Un botones estafador y su novia camarera están establecidos en un hotel.
Un policía honrado luchando solo contra el imperio de la droga, contra sus propios y corrompidos compañeros. Cuando la extorsión y la violencia son las armas que emplea la injusticia solo un hombre integro puede acabar con ella. Todos contra él, a su captura, y el contra todos. A vida o muerte.
Jimmy Corrigan (James Cagney), un tipo sin escrúpulos, tiene una agencia que se dedica a buscar en la prensa diaria gente que ha muerto dejando una herencia que nadie reclama. Su plan consiste en “fabricar” a los herederos adecuados para quedarse él con la herencia. Pero sus perfectos planes acaban torciéndose.
Una administrativa, antigua cantante, estando con un compañero, recibe la oferta de un hombre de negocios que quiere instalar un casino en las Bahamas, un casino exclusivo para la alta sociedad. Debido a cierta cantidad de dinero que ha recibido, se asociará con la intención de integrarse en dicho círculo por ciertas razones que vienen del pasado.