Un solitario inspector de Hacienda acude cada noche al club de striptease Exótica, en las afueras de Toronto, para ver bailar a Christina, una sensual joven que se desnuda para el público masculino ante la mirada de su exnovio, el disc-jockey del local.

Un fotógrafo durante la guerra soviética-afgana se vuelve obsesionado con una figura sobrenatural que aparece en sus fotografías cada vez que alguien muere.

María es una luchadora tenaz, comprometida con su entorno, y sobre todo es madre. Vive por y para su hijo Bruno, internado en un centro de salud mental. Sin embargo, el día en que su hijo recibe el alta y vuelve a casa, la estabilidad de María se tambalea, aflorando en ella un amalgama de sentimientos que creía haber enterrado.